ACERO
Es el principal elemento metálico empleado en construcción. Con él se elaboran los perfiles que forman la estructura del edificio y las varillas empleadas en el hormigón armado, al igual que en los andamios. Se utiliza igualmente en chapas y paneles en cubiertas y en particiones interiores y en falsos techos.
La utilización del acero se debe a una serie de ventajas:
- Una gran resistencia, incluso superior a la del hormigón, empleando menos material y ocupando menos espacio.
- Es reciclable.
Por contra su principal desventaja es el mantenimiento constante, como la aplicación de pinturas anticorrosivas para protegerlo de agentes atmosféricos, y la aplicación de revestimientos ignífugos en caso de haber fuego.
COBRE
Este material se utiliza en las instalaciones eléctricas de la vivienda, al igual que en las tuberías de gas o agua. También lo podemos encontrar en la construcción de cubiertas en los edificios, en diferentes formas como chapas, perfiles, tejas ...
Sus ventajas son:
- Gran maleabilidad y ductilidad, lo que permite la fabricación de una gran variedad de productos con diferentes formas.
- Una gran duración y resistencia a la corrosión atmosférica.
- Es reciclable.
ALUMINIO
Es el material mas utilizado en carpintería (puertas, ventanas, barandillas...), y en los cerramientos de los edificios. Su extendido uso se debe a una serie de ventajas como:
- La relación peso-resistencia mecánica, y la fácil mecanización (se corta, se taladra y se suelda con facilidad) permiten realizar grandes cerramientos de aluminio y cristal con menor peso que otros materiales.
- Alta resistencia al fuego y a la corrosión por agentes atmosféricos.
- Gran duración en el tiempo, apenas necesita mantenimiento.
- Es reciclable.
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